Blogia
UN PEZ ENREDADO

Lucas

Mil historias sin palabras

Mil historias sin palabras Si la imagen no cambia, os ruego que pincheis aquí hasta que consiga que la página la reconozca correctamente. Gracias

En otro mundo

En otro mundo

Como podeis apreciar en esta imagen de mi alterego en SecondLife, nuestro blog ya ha llegado a esos mundos, a medida que vaya creciendo el blog, ire incluyendo cada entrada en el mismo, para que pueda ser leida por los habitantes de este cibermundo. Gracias por seguir ahí a todos.
No voy a extenderme con las tecnicas que se emplean para introduicir cosas en ese mundo, solamente diré que el texto es plano, por lo que no puedo hacer llegar las imagenes...pero a medida que vaya aprendiendo más cosas, las hare realidad..o ciberrealidad :)

Madreselva

Surgen de mi boca largos tallos de madreselva que buscan, con ahinco, las arrugas de mi piel como asidero. Se zambullen en mi nariz haciendo cientos, miles de cosquillas en su vegetal caminar, besan la acuosa superficie de mis pupilas y sostienen mis párpados que ya no puedo abatir. Es en mi fosco cabello donde sus tallos cobran fuerza, donde como una malla se dividen, buscando caminos nuevos, mil senderos verdes que transporten sabia hacia cada zarcillo, hacia cada nuevo brote. Estalla una primavera en mi cabeza, las hojas cubren ya mi rostro, como un arbol anciano, noto que el abrazo de esta enredadera oculta todos mis pesares. Un día pensé que este abrazo era vivificante, que a mis secas y sarmentosas ramas aportaban la carnosa textura de los jugosos primeros tiempos. Ahora se que esta planta busca cada hueco de mi existencia para anidar en él. Dejarla, no impidais que todo lo cubra, dejar que sus dedos tapicen mi cuerpo desnudo, que sus verdes hojas todo lo invadan, no quiero luchar contra ella, no quiero que desaparezca, prefiero dormir, dormir arropado por su cuerpo, y en este dormitar soñar que nuestros tallos se rozan, que ambos trepamos por los muros cuya frescura es compartida, ahora y siempre.

Los asesinos en serie

 Hay quien opina de esta película que es una obra maestra, que David Fincher borda sobre el celuloide un triller que nada tiene que envidiar a sus anteriores films. Mi opinión no es la misma, poco o nada tiene que ver con el "Seven" que todos, o casi todos recordamos, ni punto de comparación con la claustrofobica "la habitación del pánico" Esta que hoy he ido a ver es una película muy bien ambientada, muy documentada..pero que sinceramente, si la empezara a ver un sabado por la tarde me recordaría esos telefilms que Antena3 se empeña en meternos en la retina como películas. Supongo que el problema arranca en unos personajes tan solo esbozados, unos personajes, todos, que parecen actores secundarios, unas amenazas que suenan huecas, una tensión que no existe, unos cambios de tiempo que resultan sorprendentes y que nos llevan saltando meses, semanas y años con solo ponerte el aviso a pie de escena.... A mí no me ha gustado, creo que podría vivir sin Zodiac... ¿tú?

Un paquete y cinco metros.

La mañana empieza perfecta... No tengo que madrugar, la mujer escapa unos minutos antes que yo de la cama, y eso me permite conquistar ese territorio común, explorar con los pies desnudos los rincones frescos, dejar que mi piel roce las sábanas, cerrar los ojos imaginando que estoy en una cama que no es la mia, en una ciudad que no es la mia, en un planeta que no es este... Pero he de levantarme y enfrentarme a la vida real. Ya he desayunado y suena el timbre, es el cartero, lo sé nada más oir el timbre, mis ojos lanzan  chispitas como las de las bengalas que agitan en el aire los niños. Casi le arranco de la mano la notificación del paquete, me dice que he de ir a recogerlo, ya estabamos vestidos, así que le digo a la mujer que venga, que vamos, cierro la puerta y...tras tirar de ella, compruebo con horror que no puedo cerrar con llave... nos hemos dejado una llave metida en la cerradura por dentro. Comienza la epopeya. Pero primero he de ir a correos, peleo un poco con la cartera, que me dice que el paquete no llega hasta el dia siguiente, pero tras decirle que Jose Maria, el cartero de mi zona me ha dicho que es un tubo enorme (por el gesto que hizo crei que ya llegaba el bazokaa que encargue a mi distribuidor de armamento pesado) accede a mirar y darme el paquete. Aún no tengo cita con el médico, estoy a un kilometro de casa, y no puedo esperar a llegar allí para abrir el paquete de Nacho. Tras enviarle un mensaje anunciandole que si es una bomba morire con un montón de inocentes, me sumerjo en el bar. Es temprano, dos mujeres cargadas de compra hablan en un rincon, ante dos cañas, un hombre vestido de ejecutivo lee el Marca y dos guardias civiles huyen casi a la carrera cuando ven el paquete... supongo que de un momento a otro llegaran los Tedax.
Pero no puedo esperar a que lleguen, pido un cuchillo al camarero "que este bien afilado, por favor, y un café con leche no muy cargado" el camarero me mira raro..como si me fuera a cortar las venas allí mismo..pero ve que estoy pletórico de felicidad, así que me deja el cuchillo y me pone el café. Ataco el paquete con ansia, y comienzo a sacar cosas ante la mirada de todo el establecimiento, despliego el poster y miro a los ojos de Viggo Mortensen de tú a tú. Y siento un picor en los ojos... En el reverso del poster hay 4 mensajes, cuatro mensajes que se me clavan en el corazón y sin poder evitarlo empiezo a llorar como un tonto, ante la mirada del camarero. Luego saco la botellita...la destapo....toco la arena de esas lejanas playas, la huelo, quiero metermela en la boca y sentir el mar en mi garganta... miro el reloj, es hora de ir al médico, pero aún quedan las conchas, cojo cada una, las examino como si mi vida dependiera de ello... hoy, me siento mas vivo que nunca, vuelvo a meter todo en el paquete y me voy al ambulatorio. No importa ya nada, nada puede arruinar este momento, ni pienso dejar que lo haga, ni la doctora, ni los 5 metros desde los que me he tenido que descolgar para poder entrar en casa, ni siquiera el quirofano de mañana. Este es mi momento, el momento de los 5 y voy a pelear por él. Os quiero, aunque no podais comprenderme a veces. Soy A+ si necesitais mi sangre, dispongo de unos litros que os pertenecen. Gracias.

Mi vida, un puzzle

Creo que la vida es un puzzle, un rompecabezas lleno de piezas que a lo largo de nuestra existencia van colocándose en su sitio; el pasado son las piezas que ya se han unido, formando algo que podemos ver y entender, sabemos que imagen forman. El presente solo es una pieza, la que tenemos en la mano, una pieza llena de ángulos redondeados o con picos, una pieza que sabemos que encaja en el cuadro que ya hemos formado, pero que hay que saber donde colocar. Por el contrario, el futuro es algo incierto, compuesto por piezas que están bocabajo, en la caja, piezas que no podemos elegir a no ser que coloquemos primero la pieza que tenemos en la mano. Hay quien se salta pasos, busca piezas que rellenen huecos fáciles, confiando en poder ir haciendo pequeños esbozos de la imagen final, pequeños cuadros sin sentido que en último momento unirán dando vida a todo el conjunto. Por el contrario, hay otras personas más previsoras, demasiado impacientes para dejar que las piezas correctas vayan llegando a sus manos, se hacen con una tijera y con pegamento, y con un poco de agilidad y muy mala leche, castran, recortan y moldean las piezas para que entren donde a ellas les apetece. Cada uno hace su propio puzzle, cada uno es dueño de usar el método que quiera, pero al final, la imagen que muestra una vez acabado, es el símbolo de todo el trabajo realizado a lo largo de una vida.
Sé que soy muy críptico hablando, que a veces me enredo, como dicen, más que la pata de un romano..pero creo que el que quiere entenderme puede, y el que prefiere no hacerlo, siempre puede agarrarse a un clavo ardiendo para salir corriendo. La vida, es en definitiva, lo que con paciencia o tijeras, ponemos en el soporte de nuestra existencia.

 

Juicio al monstruo

 

 Sí, yo soy el monstruo, todos los aquí reunidos me miráis con excitación, pero también con miedo. Aunque tenéis fe en estas cadenas que lastran mi cuerpo, en estos fusiles que apuntan a mi cabeza, vuestra fe es débil, calculáis mentalmente el grosor de las cadenas y la fuerza de mis manos, meditáis sobre el tiempo que tarda en reaccionar un soldado y si en ese lapso de espacio seria capaz de llegar hasta cualquiera de vosotros y partiros el cuello como aseguran que he hecho con mucha gente. Pero no tenéis que tener miedo, si estoy aquí es por mi voluntad, por ella me he dejado atrapar, por ella me he dejado conducir hasta esta sala, y por ella, si resulto culpable, dejaré que la justicia se aplique sobre mí.
Desde que me dieron la vida he sido perseguido, acosado, insultado. Por donde he pasado la gente se ha asustado, escondido y puesto a la defensiva. La indiferencia es algo que a alguna personas les resulta doloroso...y cuantas veces he deseado pasar inadvertido, indiferente a cuantos me rodean, ser una sombra gris más de todas cuantas se mueven en el mundo. Y sin embargo, soy más parecido a vosotros de lo que podáis imaginar.
Físicamente soy más grande que cualquiera de los aquí reunidos ¿me juzgáis por mi apariencia física? Tengo implantes que sujetan determinadas partes de mi anatomía ¿Me juzgáis por mis defectos físicos?. Yo, a diferencia de vosotros, no nací de una madre, nací de muchas si tenemos en cuanta que estoy hecho de partes de muchos hombres que sí nacieron de mujer ¿Me juzgáis por mi procedencia?. Cuando nací era como vosotros al nacer, torpe, inseguro, incapaz de controlar mis actos y de distinguir lo bueno de lo malo. Pero nadie me enseñó que diferencia había entre el bien y el mal, porque estaban demasiado ocupados en salir corriendo ante mi presencia.
Si en el bosque he encontrado a un niño, y juntos, bendita inocencia, hemos recogido flores y setas, la aparición de cualquier adulto ha sido dramática, me han disparado, amenazado con antorchas hasta que han alejado de mía al pequeño, que al igual que yo, en nada comprendía que estaba pasando. He aprendido a temer al fuego y al hombre, el que debía ser mi semejante y he sido juzgado más por lo que pueda hacer que por lo que haya hecho.
Y sin embargo, después de ver vuestros actos con los hombres y mujeres que en nada diferían de vuestra misma apariencia, llego a comprender el rechazo que sentís hacia mí, siempre valoráis más el aspecto que la humanidad de cuantos os rodean. Quiera Dios que nunca nada malogre vuestro aspecto, quiera el destino que tengáis siempre alguien que os distinga el bien del mal, y os acompañe en vuestro caminar. Buscad la indiferencia de cuantos os rodean en un mundo que os juzgara por vuestros actos y por todos los que podáis cometer.

 

Otra perspectiva

 

Eras la luz, la jodida luz que se ve cuando estas perdido en la más absoluta de las oscuridades, cuando todo lo que te rodea no tiene ni forma ni sustancia y solamente, como la tabla de un naufragio, estas tú para aferrarse a algo en la inmensidad de mi desesperación. Pero nunca has visto más allá de tus planos de arquitecto, nunca más allá de tu "profesionalidad", me mirabas y no veías más que a alguien que trabajaba a tu lado, alguien que pasaba por delante de ti, y no es que no intentara llamar tu atención, me ponía la ropa que resultaba más sugerente, la que más realzaba mi figura....y todo en vano. Llegué a amarte tanto como ahora te odio, siempre hablándonos de ella, de tu pareja, que si era maravillosa, que si había hecho tal, que si cual, hasta el punto de que parecías enfermo de amor. Hemos tenido que quedarnos ha hacer proyectos juntos, te he mirado a los ojos, esperando que dieras el primer paso, quizá un beso, quizás rozarme la mano... no sé, cualquier indicio, no es que esperase que me arrojases sobre la mesa y me hicieras el amor, no, sé que no eres de esa clase de gente. Pero ha sido tu frialdad lo que te ha matado, no yo.
Encontrar un sicario en estos tiempos no es más difícil que comprar una estatuilla del Nepal por Internet, rastreé la red hasta sumergirme en oscuros ramales, recibí ofertas de lo más curioso, hasta uno me proponía el secuestro y envío de la parte del organismo que eligiera como prueba del trabajo realizado. Casi sucumbí a la tentación, pero no podía dejar este asunto en manos de nadie, por eso me disfrace con las ropas más horribles para ocultar mi silueta, robé un coche, hice todo lo necesario para no llamar la atención. Era una venganza que, para recuperarme, tenía que cumplir yo mismo.

 

Contra el muro

Contra el muro

 

 

A los maratonianos, cuando llegan a un lugar donde su resistencia es puesta a prueba, les atenaza la sensación de haber chocado con un muro. No voy a entrar en los fenómenos fisiológicos que ocasionan esa sensación, primero, porque nunca correré una maratón y segundo porque para el caso, no son necesarios. Quiero que imagines esa sensación, imaginar que estáis concentrados en una plaza cualquiera de una gran ciudad, que a vuestro lado hay unos cientos, quizás miles de personas preparándose física y mentalmente para la misma carrera, que delante hay una cinta y alguien, un juez, disparará al aire un tiro que marcará el inicio de la aventura. Al principio, todos van despacio, hay demasiada gente como para intentar salidas estilo Fernando Alonso y aún hay 42 Km. por delante como para salir a toda pastilla desde la primera línea. Luego correrás, comenzarás a sudar al poco tiempo, irás dejando atrás a otras personas que van a un ritmo menor, pasaras por puestos que te ofrecerán cosas, bebidas y comidas que te ayuden en tu camino, te unirás a gente, adaptándote a su ritmo o ellos al tuyo, y durante ese trecho de la carrera, hasta quizá te permitas el lujo de una sonrisa, y alguna palabra de ánimo al ocasional acompañante, y en un momento dado, descubrirás que estás solo, corriendo contra ti mismo, porque sabes, que si quieres ganar alguna carrera, has de correr contra ti, no contra nadie, superarte a ti mismo, estas preparado, llevas doble calcetín de algodón para evitar ampollas, te has puesto tanta vaselina en los genitales que parece que te vayan a meter en unos minutos en prisión, y sigues allí, en el circuito, todo va bien..hasta el kilómetro 30... , mirando el pulsímetro y el podómetro, llevas un tiempo perfecto, no vas a ganar esa maratón, que va, ni lo sueñas, pero vas a rebajar tu propio tiempo bastante, y eso te hace sentir estupendamente...pero llegas al "muro" y el mazazo te deja casi sin respiración. El cansancio te dice, apoyando su mano en tu hombro, bueno, apoyar..... digamos que se te sube encima y te clava las rodillas en las costillas y te susurra con voz de prostituta de Babilonia:
- ¿Crees que vas a terminar esta carrera?, ¿Crees que a alguien de todos esos que están ahí, detrás de las barreras, viéndote correr les importa quien eres, donde vas o si terminaras?, Mira ese parque, hay niños jugando, pájaros que cantan melodías con la experiencia de cien generaciones, acaban de regar el césped, mira bien, ¿no ves las gotas de agua aun prendidas en las hojas? imagina la sensación de sentarte allí, no, sentarte no, tumbarte sobre esa hierba recién cortada, el frescor empapando tu camiseta y el viento acariciando tu rostro...
Y tú sigues allí, o no, porque es en este punto en el que todo puede cambiar, el muro a veces no sucede en una maratón, sino en la propia vida, ante desgracias que para los que te rodean son simples obstáculos que se pueden rebasar por un lado o simplemente saltar, pero que para tí, que llevas corriendo toda tu vida, se hacen insalvables. Es en ese punto donde todo lo que aprendiste, todo lo que te enseñaron empieza a desaparecer y solamente quedas tú frente a la situación, sin más defensa que tu propia mente. Es el momento en el que tienes que mirar adelante y ver una pequeña línea en el suelo, no es la de meta, que va, para esa aún te queda bastante, pero es una marca, y alzas tu pie, que parece inyectado en plomo, alzas tus ojos anegados de lágrimas y los sacudes con fuerza, como un Labrador saliendo del agua y empiezas a dar pasos al frente, como si empezaras a andar por primera vez, las piernas están congestionadas, pero no tienen voluntad, la voluntad esta en tu mente, solo son parte de la maquinaria, te alzas sobre tu cansancio y comienzas a correr de nuevo. Será duro, pero es necesario, verás más parques, más salidas fáciles a la maratón de la vida, pero sabes que esa no es tu misión, sabes que has de terminar esa carrera, por ti sobre todo, pero por todos aquellos que partieron a tu lado, por los que te ayudaron en los malos momentos, por los que fueron compañeros poco o mucho tiempo, y por lo que te queda por recorrer. Adelante, hay una meta que te espera.

Abordando un barco en llamas

A veces, a todos, antes o despues, nos da por saltar a un barco en llamas. No, no empecemos a decir que si Lucas esta tonto, que si vives en valladolid y no hay más barcos que "la leyenda del Pisuerga" o que ni siquiera hay ni rio ni nada donde poner un barco para poder pegarle fuego. Con un barco en llamas, me refiero a situaciones caoticas en la vida común de cada uno, para algunos puede ser cuestión de vida o muerte, para otros solo enfrentarse a una conversación con otra persona. Situaciones, en definitiva, tan duras, que para uno mismo son similares a la metafora que planteo, un poco salvaje quizá, pero ya me conoceis.
Abordar nuestros barcos no es fácil, normalmente, los problemas no se atacan, sino que se esquivan, las discusiones se calman sin haber resulto la causa que las motivó, en definitiva, vemos que el barco-problema, esta ardiendo, pero preferimos pensar que aun flota, que no es tan grave, que las llamas solo son en la bodega y que no va a pasar nada dramático. Luego, estúpidos de nosotros, nos sorprendemos de que el barco, la vida y todo se vaya a pique carbonizado. Hay una frase buenísima, que dice: "La vida es un naufragio, en el que a última hora solamente se salva el barco" refiriendose a lo material, en mí metafora, lo siento, pero el barco, osea, las situaciones, son lo primero que hace agua y se va, poco a poco, a hacer un bonito arrecife.
Esta claro que las situaciones hay que abordarlas a tiempo, que no vale esperar a que se resuelvan solas, los balones de la vida not e vienen a los pies, hay que correr en cuanto se les ve pasar cerca, y saltar dentro al barco a la mínima señal de humo antes de que las llamas hagan imposible poner solución a los problemas.
Si he sido demasiado criptico y nadie me ha entendido..es que soy un pésimo marinero..pero que me vais a pedir, si soy de Castilla.

Paquetes de 60 segundos

Hoy ha sido un día diferente a todos los que he ido apilando a lo largo de mi vida. Cuando te levantas, miras por la ventana y ves que todavia no ha amanecido, puedes pensar dos cosas: que va a ser un día más, monótono, regular, un diente más en la rueda de la rutina, o que tienes por delante veinticuatro horas para vivirlas lo más conscientemente posible. No sé que japones decía que lo importante no eran los días, ni siquiera las horas, que lo que realmente había que controlar eran los minutos, que eran agua entre los dedos, que había que cerrar mucho los puños para evitar que se escaparan. Hoy he apretado los puños, he trabajado en el día todo lo que he podido, persiguiendo esos conjuntos de sesenta segundos como si fueran animales rabiosos a los que tuviera que dar caza en la selva diaria...los he trampeado, los he acosado, acorralado y asaltado, los he cercado apretandolos con el dedo contra la caja del reloj, (sí, ese reloj de acero mate que hice que grabaran con la frase omnes vulnerant postum necat a euro la palabra) he intentado que fueran mis prisioneros, someterlos a mi voluntad, convertirme en el maestro del tiempo... y de nada ha servido.
Hoy he descubierto que soy un esclavo de la rutina, que soy un  hombre atrapado por la maquinaria de la costumbre, y lo peor es que sé la respuesta...tengo miedo, miedo a salir de esa máquina y perder la comodidad. Es tan fácil poner un pie en la huella que ya has marcado, que hollar nuevos caminos es un esfuerzo de titanes. Mañana despertaré, apagare el reloj, ire a trabajar, ocho horas despues volvere a casa y mi tiempo se licuará entre mis manos sin que pueda y quiera hacer nada para evitarlo.

 

 

 

Soñando soñe que te soñaba

Voy a ser sincera contigo, creo que siempre lo fui, o al menos crei serlo, pero voy a intentar rizar el rizo de la sinceridad, hacer tirabuzones con el entendimiento para a ver si así, de ese modo, consigues comprenderme. Y en vista de que mis palabras a veces se vuelven enigmáticas y no comprendes su significado, pues voy a dartelo todo mascadito, ya sabes, corto con los incisivos, desgarro con los caninos..etc, a ver si despues de regurgitar estas palabras, la papilla que quede es lo suficientemente comprensiva para tí.
Te necesito, siempre te he necesitado, no como el aire que respiro o el agua que bebo, no, no es una necesidad tan instintiva, pero tiene algo de involuntario, algo de vital. Necesito que estes ahí, a un lado, que me escuches, que me hables, que me comprendas, si eso es posible, necesito ser importante para tí por encima de todas las cosas. Con esto ya te estoy dejando bastante clara mi postura.
No tengo la necesidad de dar nada, porque ya te entrego mi tiempo, pero te necesito, necesito tener tu imagen, tu voz, necesito el tiempo que te rodea, y sobre todo, necesito sentirme única para ti.
Nunca has comprendido nada, eres demasiado superficial, te escondes bajo una tupida carcasa de egocentrismo, de endiosamiento, comulgas a golpe de frases hechas, sacadas de libros o películas y olvidas, en el camino, que hay algo llamado sentimientos. En un momento de tu vida has dejado los sentimientos entre las hojas de cualquier libro y cabalgas frío e insensible.
Mientes cuando dices que te reclaman, no es que yo pueda comprobar si es veridico o no, pero te alejas de mí, y eso me duele, más quizá que una bofetada con guante de acero.
¿Sabes?, a veces sueño contigo, sueño que estas hecho a mi idea, que eres perfecto, idilico, que eres la imagen que he formado de tí en mi mente, y me niego a modificarla, porque temo por mís sueños, temo que si alcanzas con tus manos la burbuja que me rodea, todo se descompondrá como un cadaver, veré que tienes ojos apagados, manos frías, que tus recovecos tienen olores de persona y mi corazón se partirá en pedazos tan pequeños que será imposible volver a recomponerlo.
En el fondo quiero que seas como los demás, quiero meterte en el mismo saco, porque así es más facil comprenderte, y basta un simple gesto hacia esa idea, para que todo tu cuerpo caiga dentro. A veces sueño que eres diferente, quiero que lo seas, y si no lo eres, tendré que despertar. Sí, puedo volver a soñarte, pero quedará la duda, contaminando el sueño y ya nada será lo mismo.
Hoy te volví a soñar y no me diste lo que quería.

Premios blog 20minutos

Pues sí, como ya anuncié hace unos días, ayer día 8 arrancaron los Premios Blog 20minutos, de momento son 1506 blogs, con sus respectivas historias los que competimos en la misma categoría. Cuando me decidí a inscribirlo, la verdad es que no encontré una sección que reuniese las caracteristicas de este espacio, porque es algo raro, no es un blog tecnológico, ni uno de actualidad, no es un blog erótico, tampoco es de humor, ni es un videoblog.... así que ya a la desesperada, lo metí en la sección "Personal", aunque lugo pensandolo dije, "somos 3, pero escribimos desde lo íntimo, desde lo personal", y ahí se ha quedado.
No espero llevarme ningún premio porque este blog lleva poco tiempo en marcha, a pesar de que llevo haciendolo desde el 14/04/2005 en el que empece a escribir en los espacios que daba el msn, luego, un día descubrí que todas las posibilidades que daba para su edición eran continuamente anuladas, te impedía poner imagenes fuera de los comentarios, te impedía usar palabras con su censura, así que cojí los bartulos y me fuí a otro blog donde la cosa parecía que prometía más, allí fue donde empece a conocer a Nacho y donde creo que recuperó la ilusión por escribir, aunque el tiempo apenas le deja hacerlo (tranquí, ya llegará la jubilación y podrás dedicarte a escribir XDD), estabamos medianamente bien, el blog era bonito, parecía un papiro..pero las cosas empezaron a desmangarse, había días en los que poner una entrada resultaba imposible, te quedabas mirando el avance del explorer o del mozilla como si fueses a morirte allí mismo, para ver el pantallón ese de error o ser redirigido a la página principal del mismo. En esas estabamos, cuando apareció Kiko por el hotel, le propuse venirse a la bitacora, y aceptó, y parece que se ha quedado. Ahora estamos aquí, sin presiones, bastante ligero el servidory una edición normalica, que tampoco soy yo un monstruo del php, así que me limito ha tocar lo que sé tocar.
Bueno, lo dicho, en la sección enlaces os dejo un dibujito en el que podeis pinchar para dar un voto, se permite un voto al día, así que...intentarlo, a ver que pasa, pero aunque no voteis, no dejeis de pasaros por aquí, que de algo hablaremos. Gracias

Los lugares imposibles

Siempre hay piedra, enormes muros de piedra que separan el exterior del recinto amurallado de las ciudades. Britania , Prontera, Giran, Noria, y un largo etcetera de lugares donde la vida se desarrolla de un modo impersonal, todas esas ciudades pertenecen a la virtualidad. Son lugares donde gente de verdad adopta personajes y roles para vivir una vida lejos de la realidad. Caballeros, guerreros, magos, orcos, ladrones, artesanos, todos recorren esas ciudades y esos mundos como si esa vida fuese real, más importante si cabe que la que les rodea fuera del ordenador, en sus propias casas.
La edad media de esos jugadores ronda los 15 años, son jovenes de personalidad fuertes, despiertos, inteligentes, y sí, supongo que algunos de esos juegos pueden potenciar la violencia... pero lo cierto es que la persona que es violenta, lo será con juegos o sin ellos. Unos adoptan roles de asesinos, y se recorren esos mundos imposibles intentando sembrar el miedo, el saqueo y el crimen, otros adoptan una actitud pasiva, van a su aire, apenas se comunican con nadie y se dedican a jugar para intentar que el personaje creado crezca lo más rápidamente. Y por fín llegamos a los denominados Frikis, personas que se meten en el papel del personaje e interactuan con él, que aceptan las reglas y limitaciones que el juego les presenta, sienten la necesidad de un equilibrio entre bien y mal y en cualquiera de los dos lados, emplean el honor.
Pero creo que me estoy desviando un poco del tema, quiero hablar de las ciudades virtuales, esos sitios donde se reunen los personajes y las personas que pueblan estos juegos. Son lugares extraños, donde si te pones ha hablar con la gente que te rodea, descubres que hay medio mundo allí; españoles, mejicanos, peruanos.... si se trata de un juego en castellano, encontraras un sinfin de hispanoparlantes, pero si se trata de uno en ingles, la cosa ya se vuelve más internacional y puedes ver hasta a gente coreana, sueca, filipina y un largo sinfin de nacionalidades. Por un momento, el mundo parece no tener fronteras físicas, solo virtuales e idiomaticas, te encuentras con tu propio yo virtual, que nada tiene que ver con el yo real.
El único problema es que todos esos sitios, todas esas gentes, todas esas casas, objetos, animales, monstruos y ladrillos, tan sólidos en su virtualidad, son tan frágiles que basta que alquien tire en algún sitio de un enchufe para que nunca hayan existido.

Encontraremos un camino, si no existe, lo crearemos

 

Nadie entendía porque María, una prometedora médico, con todas las posibilidades para convertirse en una reputada profesional de la salud, un día lo abandonó todo para irse a África. La gente especulaba alrededor de las causas barajando desde las más lógicas, hasta las más increíbles.
Maria y yo habíamos sido novios, amantes y compañeros en la universidad. Infinidad de veces habíamos alineado los factores para que el amanecer nos encontrase enredados en las sábanas de la misma cama, habíamos mentido a padres y tutores para poder seguir unidos en vacaciones, en definitiva, habíamos disfrutado del amor con todas nuestras energías. Por eso no me extrañó que una de las causas que la gente había utilizado para explicar la marcha de María fuese nuestra ruptura. Nada más lejos de la realidad. La causa efecto era inversa.
Sigo manteniendo una comunicación casi constante con ella, recibo cartas en las que me narra lo angustioso de la situación africana, lo duro que es intentar curar enfermedades que en el primer mundo son casi una anécdota y allí se convierten en verdaderas pandemias que arrasan aldeas enteras. Le envío todo el dinero que me permite en este mundo tan competitivo mi delicada situación de joven arquitecto. Lo último que le hice llegar fue un paquete de un millón de preservativos "Espero que tengas suficientes, te estas volviendo muy promiscua -le bromeé- me he tenido que recorrer todas las farmacias de la ciudad para encontrar de tu gusto" la vi reír en un video que me envió, y las clases en las que intentaban explicar a un grupo de matrimonios la forma de utilizar los anticonceptivos y su necesidad para frenar la que se esta convirtiendo en principal causa de mortandad en África: el sida. Yo era su contacto en el mundo afortunado.
"Encontraremos un camino, y si no existe, lo crearemos” aquella máxima del general Aníbal se había convertido en nuestra frase de universidad y ella siempre me la repetía cuando me pedía cosas: retrovirales, un hospital de campaña, muletas, prótesis, etc. Yo movía mis contactos en ongs, en gobiernos e instituciones, pero cada vez me encontraba con más puertas cerradas, con menos presupuestos y más espaldas que manos firmando cheques. Ella cada vez me pedía más, y yo cada vez sufría más por no poder dárselo.
Aquella mañana, recogiendo el correo, encontré su carta, como siempre, llena de sellos de las oficinas de correos que había recorrido hasta mis manos. La abrí con desgana, sabía que era un cúmulo de agradecimientos, de fotos y por supuesto, un aluvión de peticiones que ya empezaban a mermar mi paciencia y carácter, pero cuando abrí la carta y vi la postal me quede perplejo, con la mandíbula desencajada y el resto de papeles cayó de mis manos hasta el parquet. "¿Puedes traernos la navidad aquí?".
Indudablemente había enloquecido en aquellas tierras, tiré la postal lejos y estuve toda la mañana dando portazos y destrozando papeles en los que me era imposible concentrarme. Le grité a las paredes ante la imposibilidad de poder hacerlo a ella, y ya cuando mi cabeza empezaba a estar a punto de saltar de mis hombros, decidí salir a pasear para intentar despejarme.
La ciudad  presentaba un aspecto de intensa actividad con la proximidad de las fiestas de pascua, los comercios abrían sus puertas a los devoradores de productos, y la gente corría de un lado a otro buscando ese objeto especial que demostrase el amor que se profesaba a la persona receptora, como si el amor se pudiese concentrar en un objeto. Y entonces, mi mente se despejó de golpe, supe lo que tenía que hacer para llevarle a María la navidad. Tenía que crear el camino.
La noche africana esta llena de ruidos de la selva, sonidos que pueden llegar a ser terroríficos, pero no era eso lo que mantenía despierta en su cabaña a la joven, era el pensamiento de haber perdido parte de su corazón. Se levantó de la cama y comprobó la fiebre de la niña que había trasladado a su dependencia, se encontraba estable.
Sabía que había abusado de la amistad que aún la unía a Jose, había ido tensando tanto la cuerda que al final se terminado por quebrar, pero era tan angustiosa la situación en la que se encontraba la aldea, que cada día encontraba una nueva carencia. Pero lo de la navidad...aquello había sido la gota que había colmado el vaso...pero la añoraba tanto, echaba tanto de menos a su familia, a Jose y a todo lo que había vivido, que a veces hasta se cuestionaba su permanencia allí. Aquella postal la había escrito pensando en las fechas que se avecinaban, pero lo que realmente quería escribir era: "ven a verme por navidad".
Una lágrima de las que anegaban sus ojos se deslizó por su tostada mejilla, por eso apenas pudo ver lo que estaba sucediendo ante sus ojos, pero los chillidos la devolvieron a la realidad, se apartó las lágrimas sobresaltada y corrió hasta la cama, tomó a la niña entre sus brazos y se dirigió a la puerta. Nunca había vivido un ataque entre tribus, pero la habían hablado de ellas, eran crueles y virulentas, ya que la principal arma usada eran machetes. Pero cuando llegó a la plaza, descubrió que no había ataque alguno, todos los habitantes de la aldea estaban allí, contemplando el cielo, un cielo del que caían...copos de nieve!! y cuando María y los otros aún no se habían repuesto de su perplejidad, en un rincón de la plaza se hizo la luz y surgió un enorme árbol de navidad todo lleno de luces, cintas y bolas, y sentado a sus pies, un Jose caracterizado del rey Baltasar aguardaba rodeado de pequeños regalos.
Creo que se besaron un millón de veces, entre risas y lágrimas Jose la reprochó todo lo que había tenido que hacer para lograr trasladar hasta allí una máquina de hacer nieve, pero lo que no había logrado era que le dejaran tirar fuegos artificiales por el riesgo de incendio. María le presentó a todos los niños y adultos de la aldea, nadie se quedo sin su regalo, a excepción de María.
-¿Para mí no hay nada majestad?- preguntó mimosa.
Él se encogió de hombros, rebusco entre los ropajes hasta llegar a los vaqueros, y sacó un pequeño paquete. Era un anillo.
Aquella noche volvieron ha hacer el amor como en los tiempos de universidad, fundiendo sus cuerpos en uno solo. Ahora la gente tiene otro motivo para especular las causas que motivaron ha Jose a dejarlo todo e instalarse en África, pero yo las sé, se llaman María y un bebé que nacerá el 25 de diciembre, tendrá los ojos de Jose, el corazón de María, y por supuesto, se llamará Jesus.

 

Ver para llorar

Alucino en tecnicolor, con ese colorcillo chirriante que provoca epilepsia fotosensible, ante la noticia, vete tú a saber si cierta o no, de que Antena3 prepara un programa de lo más...¿morboso? Se trata no ya de sacar a famosillos, famosetes, canallas, canallitas, amigos, amantes, conocidos, vecinos o la madre que pario de los personajes de moda. Quieren ir más allá, ya eso de que las parejas se peguen o discutan en directo, de que pruebas de adn salpiquen los platos para unir o destrozar familias en plena puja de share, pertenece al pasado, son formulas caducas, ya no dán más "caña", hay que ir más allá, así que alguien ha decidido poner a los muertos un polígrafo en la boca, o en la voz, para ser más concretos.
Se trataría de analizar la voz de gente famosa que hizo algún tipo de entrevista, pasarla por una máquina que analizaría si su voz se crispa, si duda, si miente en definitiva. Decía mi abuelo, que cuando el hambre aprieta, ni el culo de los muertos se respeta, y va a ser que es cierto, porque al paso que va esto de la televisión, dentro de nada tenemos especiales de agonias de famosos, infartos en directo, circos romanos, y vete tú a saber que más. Eso sí, fuera del horario infantil, que los niños no sufran, que ya están los padres para sufrir por ellos, crisparlos y de paso que los hijos aprendan que la caja tonta, de tonta no tiene un pelo.
En un comentario de uno de los post, pecesita me decía que los hijos no tienen la culpa de ser como son, que la culpa es de los que están a cargo de su educación. Estoy de acuerdo y encontré un apunte gráfico: los hijos actuan como ven hacerlo.

Tú puedes

Creatividad:
1.Facultad de crear.
2.Capacidad de creación.

A todo esto añadiremos los terminos de establecer, fundar, introducir por primera vez una cosa y elegir a una persona en un cargo que antes no había.
Ya estareis pensando de que va este post de hoy, y es que desde que escribo casi todos los días, me salen unos post de lo más raritos, pero es que teneis que lidiar con mi mente, y si ya me es dificil a mi mismo, que la tengo, imaginaros a vosotros.. pero no os preocupeis, hoy sera sencillo, hoy os hablare de la capacidad creativa que todos tenemos dentro, si, todos, lo que pasa es que a fin de cuentas, como todo buen músculo, precisa de un entrenamiento para poder dar sus frutos. Los rasgos principales de de la personalidad creativa son:
*Capacidad para la perplejidad.
*Capacidad de concentración.
*Capacidad para aceptar situaciones conflictivas.
*Disposición para renacer cada día.

Esto...yo mismo creo que no poseo la segunda, o al menos no la poseo durante largos plazos de tiempo, en el colegio decían "este Lucas se distrae con una mosca" Y es que una mosca de esas negras, enorme, revoloteando por la clase, haciendo que las chicas se encogiesen aterrorizadas cuando se acercaba a ellas, chocando insistentemente contra en cristal de la ventana, o una pequeña, de las corrientes paseando por el libro y limpiandose constantemente la cabeza y las alas, me resultaba más entretenido que el Teorema de los números primos.
La creatividad no es un mito, no es una habilidad reservada a grandes mentes, a señores o señoras elegidos para poseer un poder negado al resto de los mortales, simplemente hemos aprendido a no actuar creativamente, pero la creatividad es de todos, todos, hasta tú, eres capaz de ser creativo. Entonces... ¿porque nos bloqueamos?.
-En los centros de estudio , los profesores piden respuestas, no soluciones.
-La celebre frase de "siempre se hizo así y salió bien".
-Tomar la creatividad como una distracción, como si el acto de crear no llevase consigo un proceso formador y provechoso.
-Miedo al descontrol, si la gente piensa, imagina cosas, dejaran de ser dociles y pueden constituir una amenaza.
-Prevalencia del formalismo en contra de la intuición, el sentimiento, el humor, la expontaneidad...

En resumidas cuentas, no todos tenemos la capacidad creativa de Dalí, o de Miguel Angel, pero dentro de todos hay una pequeña luz, una llamita de creatividad que necesita ser alimentada, que necesita que uses en ella el combustible de sorprenderte a cada minuto, de prestar atención a cuanto te rodea como si lo descubrieses por primera vez. Despertar cada día como si fuese el primero de todos tus días, pegarle un mordisco y dejar que su jugo inunde tu mente.

 

Forjando una llave

    Pido perdón a todos los no nacidos, pido perdón de todo corazón a todas las personas (porque son personas aunque nunca hayan ni vayan a nacer de un vientre femenino) que habitan en mi mente por no darles vida. Hay quien no entiende, ni concibe que un personaje de un libro pueda tener vida, para esas personas, el personaje no nace, solo es un instrumento para narrar una historia. Esas personas jamás leerán un libro como el autor quiso que la historia fuese interpretada por los ojos que recorren sus páginas. Verán descripciones, metáforas, verán cuadros estáticos, fríos, no verán un película corriendo ante sus ojos, jamás podrán saltar de su vida al interior de ese mundo fabricado con letras.
Por eso quiero aprovechar estas lineas para pedir perdón a todos los personajes que estan en mi cabeza, los que a gritos piden que sea narrada su vida nunca nacida, les quiero pedir perdón por no tener el valor, la capacidad, la voluntad en definitiva, de  ser su intrumento para emerger a este mundo. Pido  perdón a Dalmacio Aquiles por no contar nada de su tienda donde salvó a un niño de morir apuñalado por un ratero y cuyo  premio fue una navajada en pleno rostro, pido perdón a Nadia, por habitar aun en ese ático desde el que ve caer etérnamente los cabellos de sus muñecos,  pido perdón a esa mujer valiente que me pide recorrer el mundo de mi mano,  pido perdón a los cazavampiros que quedaron atrapados en infantiles hojas cuadriculadas y a todos los que aguardan para narrarme sus historias.
Aún no he encontrado la llave que abre la puerta que os hará nacer, creo que una de las muescas es la constancia, por eso, cada día intento escribir algo aquí, cada día apartar de mi banales horas de ocio e intentar convertirme en la llave. Perdonar si tardo más de lo que yo mismo deseo.

Una jaula de luz

 

Veo y siento sobrevolar por encima de mi cabeza, mientras escribo, la pareja de canarios que alojo en mi cubil. Se están haciendo todo unos expertos en el arte del vuelo. Al principio de soltarlos, eran torpes, inutilizados sus poderes por lo diminuto de la jaula donde residen, parecían tener las alas pegadas al cuerpo. Los recuerdo asomándose temerosos por la puertecilla, mirando al exterior como si el mundo se acabase más allá de aquellos barrotes blancos. Ahora sin embargo, se han enseñoreado de todo, los veo picotear el cráneo de mi calavera de resina, pisotear el órgano del archimago, hacer el amor sobre los libros de Stephen King y jugar al vuela que te pillo por encima de las estanterías.
Cuando se cansan se vuelven a meter solos en la jaula, aunque a veces soy yo el que se cansa antes que ellos y decide que es hora de regresar a su casita de alambre. Es sencillo cazarlos, solo hay que quitar completamente la luz de la habitación, deslizarse lentamente hasta ellos y cogerlos, hasta alguna vez he probado a poner el dedo bajo sus patas para transportarlos posados en él. La oscuridad es  su debilidad. Se quedan completamente estáticos, sin atrever a moverse porque el mundo se ha desvanecido justo delante de ellos.
Hubo un tiempo en el que en las casas no había electricidad, ni luz eléctrica, y la vida solo existía durante el tiempo que duraba el sol en lo alto. En las casas había chimeneas, trémulas luces que deformaban las cosas y los rostros, centros de reunión de los hogares donde se narraban historias de monstruos, asesinos y bandoleros, porque siempre hubo gente dispuesta a robar a unos para dárselo a otros, y gente dispuesta a robar a todos para quedárselo ellos.
¿Imagináis la expectación que podía atraer una radio en aquella época cuando las televisiones eran tan caras que solo había una o dos en el pueblo? ¿Cuando aquella pequeña caja era el único contacto con lo que estaba sucediendo en el resto del mundo? Hubo un tiempo en el que los hombres eran canarios asomados a la puerta de su jaula.

 

El banderillero mayor

Hoy enterramos a Don Felix.
El tiempo no ha hecho mella en mi recuerdo, aun, si cierro los ojos, puedo verme de crio, casi llevado a rastras por mi madre a que Don Felix, el practicante del pueblo, clavara con pulso titubeante las agujas en mis tiernas nalgas.
Para llegar a la consulta había que subir una interminable escalera que parecía conducir al cielo, un cielo que para mí era puro infierno, siempre temí al dolor, ya fuese producido por accidentes o por médicos. Ya de las escaleras se desprendia un penetrante olor a antiseptico y coñac, amalgamado en el aire dulzón. Ese olor siempre me ha acompañado en cuantas visitas realizo a hospitales y sitios de cura, aunque no huelan así, mi mente recupera el recuerdo de aquella rustica consulta y lo desliza hasta mi olfato.
Reconozco que al principio caía en la triquiñuela de aquel hombre de voz ronca, cuando ya con los pantalones por la rodilla, inclinado, y ofreciendo mi retaguardia, pasaba el algodón impregnado en alcohol, y golpeaba la carne infantil con el dorso de la mano simulando haber puesto la inyección, para acto seguido pinchar la banderilla en toda su longitud. Luego te daba un caramelo que sabía a lágrimas y mala leche, porque si las miradas de un niño pudieran matar, a Don Felix lo hubieran enterrado hace veintitantos años.
No sé los conocimientos de medicina que tendría ese buen señor, pero sé que a mucha gente dejo coja por inyecciones mal puestas, agujas que se doblaron al entrar mal, y otros desmanes propios del oficio, del alcohol y de la falta de sustituto, una combinación que para bien o mal, marcó la vida de todo el pueblo.
Ayer, el que fué banderillero mayor, cogió los trastos y se fué a poner una banderilla a San Pedro, a ver si también cuela lo del cachetito.

Se ruega una oración por su alma.