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UN PEZ ENREDADO

Veinteañera

No hay nada como la incomprensión y la arrogancia de la juventud, entre la que me incluyo. No pueden callar su inconformismo, ese que ha hecho que el mundo evolucione hasta nuestros días, poniendo a la humanidad entera en cuestión, en un alarde de originalidad, exquisitez, o de postularse como seres únicos y diferentes.


Esto nos pasa a todos, pero en al edad temprana además, nos creemos libres de los prejuicios educacionales como si despreciar a nuestros mayores (mejor si son mujeres) nos hiciera más fuertes, líderes o ejemplo a seguir.


Y digo esto a cuento de una bitácora encontrada en este sorprendente mundo de la red de redes, en la que todo lo que he escrito toma valores superlativos, desenmascarándose, con una sola frase, su redactora.


Este es el enlace Mi concepto de las mujeres


Y esta la frase que su subconsciente ha dejado pasar delatándola: “Bueno, si fuera un hipermegamultimillonario me pasaría los días en las Barbados ;-)”.


Me resisto a creer que todos tenemos un precio. Con este escrito constato que puede ser mayor o menor, pero parece que lo tenemos. La verdad me niego a creerlo de mi mismo



8 comentarios

Chari -

Buenas noches,acabo de leeros a todos y alomejor no tengo razon con lo que voy a decir pero todos hablais de que si tenemos precio pero depende de la forma que nos lo proponga,de ahi el ejemplo de Igrein.Pues yo pienso que si tenemos precio,pero nuestro orgullo es tan grande que jamas lo admitiriamos,admitirlo es caer bajo,nuestra moral no nos lo permite,en cambio la mayoria piensa que es preferibe ser un lameculos que un comemierda.¿Quien no tuvo un enchufe alguna vez para algo(u n trabajo,una cita,una entrada)?acaso eso no es rebajarse a algo o alguien?claro que si!!! pro eso esta bien visto,en cambio que nos ofrezcan dienero por sexo por ejemplo,es caer muy bajo,pero si no hay dinero por medio y la persona nos atrae........!!pero en que mundo vivimos?solo nos tragamos el orgullo cuando lo hacemos por alguien y no por nosotros mismo,somos tan buenos? o acaso necesitamos poder limpiar nuestra conciencia? somos mas listos que leales? o mas orgullosos que sinceros? o tal vez solo somos lo que los demas quieren ver que somos.......... un saludo a todos y perdonar por verlo de esta forma.

Nacho -

Comienzo agradeciendo el interés que habéis mostrado por este asunto.

Amy:

Puede que ahora queramos dar vueltas alrededor de lo escrito por nuestra veinteañera, pero esto es lo bueno que tiene plasmar las opiniones blaco sobre negro: no hay lugar a equívocos, solo a rectificaciones. Así que no caben divagaciones; no hablaba de un hombre multimillonario en amor, ni en cariño, ni en inteligencia, ni en ingenio, ni en diversión. No. Habla de un “hipermegamultimillonario” que le pagase su estancia en las Barbados.

Lucas:

No hay precio que altere la prioridad de nuestros principios. Si así fuese dejaríamos de ser personas para ser marionetas de nuestros deseos. Y ¿sabes? Me gusta que sea así. Así es como aprendí que mis amigos merecen todo mi respeto, y mi amor, además de mi respeto, mi veneración.

Igrein:

Gracias por tu ayuda. Tu ejemplo ha clarificado mucho mi postura, aunque en tu caso, y teniendo en cuenta que estás casada con un hombre que te ha dado todo lo que dces que te ha dado y te da, y con el que funciona bien hasta en lo más íntimo, veo poco probable que cedas a las insinuaciones de un perfecto desconocido ¿O sí?

Veinteañera:

Reléete. Si crees haber dicho algo que no querías, rectifica. En caso contrario sigo pensando como dije.

veinteañeraencrisis -

Bueno... esa frase era una broma, para paliar la dureza de mi post con algo de humor... no obstante, es un buen tema para hablar.


Creo que sí, todo el mundo tiene un precio, y no tiene que ser precisamente dinero. Es decir, no tiene que ser sexo x dinero.

Los estudiantes sacrifican horas para obtener una carrera (no por amor al arte), algunos van a misa con la esperanza de salvarse de sus pecadosss... Nada, NADA, es altruista, todo es por una motivación, para conseguir ALGO, y no tiene porqué ser dinero.

Es decir: tenemos un precio (la felicidad).

Igrein -

Yo ya he estado entre 3 paredes y una espada, y créeme que mis principios son mis principios.
No acepto nada que no quiero a cambio de nada y menos si me tengo que rebajar. Menos.

lucas -

BUeno, veamos, ¿nos centramos en el hecho de valorar el valor a mantener una relación sexual con alguien a quien no deseamos para obtener algo? Imagina lo siguiente, tu tienes una necesidad de algun tipo, médica, jurídica, no se, algún problema al que tú no lo veas resolución. De pronto aparece alguien, y te ofrece solucionar ese problema a cambio de sexo y luego desaparecer para siempre de tu vida...quizas ahora digas que no, que mirarias la forma de solucionarlo, etc, pero creeme, la vida es muy perra y habra momentos en los que te ponga entre 3 paredes y una espada.

Igrein -

No estais hablando de lo mismo.
No es lo mismo ponerte un precio por ir a trabajar 8 horas, que por acostarte con alguien.
Yo creo que no todos tenemos un precio.
Si a mi me viene George Clooney y me ofrece un millon de dolares por acostarme con él, le voy a dar una negativa rotunda, simplemente porque me ha ofrecido dinero.
Si, simplemente, se me insinúa es más probable que acabemos en la cama.
Todo tiene un precio mientras no se toque mi honor, mis principios.
Así es como lo veo yo, pero, claro, no todos somos iguales...
Un beso.

lucas -

Estoy plenamente de acuerdo, quizá no nos vendamos en plan "traición", de vender nuestros principios, pero estoy seguro que todo tiene un valor, no monetario, pero si emocional, afectivo,etc. Me recuerda aquella frase que atribuyen a Groucho, el cual se acercó a una mujer y le dijo "¿sted se acostaria conmigo por un millón de dolares?"La mujer se ruborizó y sonriendo bajo los ojos. "Oiga, -volvio a la carga el hombre del bigote pintado- le doy un penique y se viene a mi suite" la mujer alzó la vista enfadada y le gritó: "¡¡Pero oiga!!¿Que se ha creido que soy yo?" a lo que Marx contesto con toda la tranquilidad del mundo "lo que usted es ya lo sabemos, solo estamos discutiendo el precio".

Amy -

La pregunta sería ¿por qué crees que es malo tener un precio? El precio casi nunca se mide en la moneda vigente, y otras muchas sí. Pero nos pasamos la vida haciendo cosas por precios marcados. Trabajamos por un sueldo, por debejo del cual preferiríamos estar en el paro. O bien si nuestra economía nos lo permitiese no habría sueldo que nos hiciera trabajar. Ponemos condiciones en todos los asuntos que nos vemos involucrados, no haríamos esto si no fuera por aquello, me dedico a mi amigo "tal" en cuerpo y alma porque él en su día lo hizo conmigo. Adoro a mi madre, pero es que ella se ha desvivido por mi desde que nací. Hay miles de circunstancias en la vida que demuestran que sí que tenemos un precio, bien sea trueque, bien sea monetario. Pero tenerlo lo tenemos.